Yo fui madre primeriza: cinco consejos que habría agradecido antes de llegar a casa

Desde que ponemos nuestra bonita cara en este mundo, por primera vez, no dejamos de tener momentos de primerizos día tras día: siempre hay algo que por primera vez llevamos a cabo nosotros mismos: esa exposición oral de un tema en clase , ese garito del que todo el mundo habla y al que nunca has ido, ese peluquero genial que con sólo mirarte tiene tu look ideal, esa conferencia sobre tu tema estrella ante un amplio quórum … Y en todos esos momentos un mini cosquilleo te recorre, una y otra vez en tu cabeza resuenan «¿todo irá bien?» » ¿no haré el ridículo?».

Pues bien, si en todo lo anterior hay mariposas por el estómago, el momento padre / madre primerizo se lleva la palma.

Yo no dejo de recordar mi propia experiencia con un poco de amargura, aunque según van pasando los años veo un punto cada vez más cómico y grotesco de aquellos momentos que me hace hasta sonreír.

Pero es cierto que cuando lo vivo en los padres de enfrente, cada vez me da más rabia y me pone de peor humor. Sobre todo porque claro, con el agobio que están pasando los pobres escuchando mil y un comentarios, llegar yo y decirles «no hacer caso a nadie», » llevaros por vuestro instinto» «echarnos a todos fuera y quedaros solos con el bebé» …me parece que en esos instantes es crearles un poco más de conflicto.

No obstante considero que estos son los cinco tips indispensable que todo primerizo debería tener presente cuando el peque entra en su vida:

– es/son TU/s hijos/as: esa criatura que has esperado tantos meses, que has imaginado, está por fin cara a cara contigo, pero lo más importante, debe estar PIEL CON PIEL, y no es momento de brazos de abuelas, abuelos, tíos, hermanos… En esos momentos nada como los brazos y el pecho de su madre y/o padre. Es vuestro momento. No lo perdáis. No dejéis que os hagan perderlo. El instinto sale: déjalo fluir. No hay mejor sitio en ese momento para él que vosotros.

– el AMOR lo puede todo: y aunque es muy reparador, no es suficiente para que podamos tirar de nuestra familia. No, no estoy loca, es que hay también que DESCANSAR, así hay que aprovechar esos ratitos que el peque duerme. Una cabezadita de diez o quince minutos es más que reparadora. Las visitas lo entenderán, y si no lo hacen, es que no son visitas de
«calidad». Es cierto que da apuro que la gente venga a visitar y estar dormido, pero de verdad, después de ser madre no molesta nada de nada. Yo intento no ir mucho a los hospitales, la verdad, pero es que hay gente a la que quiero tanto, que para mí ir es vital, aunque sólo sea para estar tres minutos.

– el reloj se desajusta: tus días y noches se reordenan, o mejor dicho se unen, parecen todo uno. Pero hay que seguir haciendo cinco comidas al día. Y si estamos en la maternidad sólo hay que dejarse mimar por el menú del «todo incluído» o por las delicatessen de los amigos y familiares.

– las pruebas que hacen a los peques en las primeras 24 horas del bebé, harán saltar tu instinto protector, y será una de las primeras veces que sientas en tu piel ese instinto maternal o paternal de leona o león. Ver como sueltan de pronto al bebé y su pequeño susto ( ¡ah! ¡no! ¡es un acto reflejo!). Me gustaría saber cuántos padres no han tenido ganas de coger al doctor o matrona de turno al hacer esas «perrerías» a su peque.

– no hay nada como estar en casa, pero el momento en que te dan el alta, una especie de agobio empieza a entrarte, y no haces otra cosa que pensar si te acordarás de hacer todo lo que ese bebé necesita. Yo te voy a contestar: TE ACORDARÁS y PODRÁS. Trata de ponerte ropa cómoda, y de sonreír. Por fin vuelves a casa con uno de los SERES más importantes de tu vida y empiezas a vivir la vida con un KIT dependiente para el resto de tu vida… ( bueno, va, para un par de años…)

Y a ti, ¿ qué te habría gustado saber antes de llegar a casa con tu bebé?

Primerizos

Una nueva familia


Fuente imagen: https://encrypted-tbn1.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcRL_2Zi8eLhEzkC2YMCstFPHNW69m8CdNT7dF7tUG2nGURptdW6zQ

2 Comentarios en Yo fui madre primeriza: cinco consejos que habría agradecido antes de llegar a casa

  1. Marta
    27 marzo, 2014 at 09:57 (10 años ago)

    Hola!! Yo agradecí el momento en que vino LA VISITA, con mayúsculas, y se quedaron con la mayor. Pude dormir y descansar, una hora o dos, no lo sé, pero eran necesarias.
    Sobre lo demás, estoy de acuerdo contigo, nuestro instinto y nuestra razón son los que deben prevalecer.
    Besos especiales!

    Responder
  2. AquiCabeDeTodo
    27 marzo, 2014 at 10:53 (10 años ago)

    Más que me contaran algo, a mi me hubiese gustado saber decir NO a muchas cosas. Al final, por intentar quedar bien con todos, quedas mal contigo mismo.

    La primera noche en casa no dormimos nada y pensé que como fuera así mucho tiempo me moriría y, ya ves, al final repetimos dos veces más.

    Aquí te dejo mi modesta visión sobre este tema

    http://losangelesdepapi.blogspot.com.es/2014/02/voy-ser-padre.html

    Responder

Responder a AquiCabeDeTodo Cancelar respuesta