octubre 21st 2012 archive

#150palabras El viaje del ratón Ton (luna, lluvia, bote)

El pequeño ratón «Ton» observa desde su pequeño agujero el caer de la lluvia. Está encandilado por un punto blanco a lo lejos. ¿Qué será?

Piensa en la manera de poder llegar hasta él y descubrirlo.

El agua cae, sus pequeñas patitas no pueden correr bajo esa lluvia.

Mira alrededor, en la trastienda de la panadería en la que vive, ¿ qué le podría ayudar en aquel pequeño viaje?. Sacos de harina, cartones de huevos, botes de mermelada… ¡ eureka!

Vuelca el cubo de basura y lo hace rodar, un pequeño bote de confitura cae . Será su medio de transporte hasta el punto blanco. Coge dos palillos de plástico a modo de remos y se lanza a la aventura.

Poco a poco, se va a acercando. Cada vez el brillo es mayor. Y los nervios también. Ya está. Ya lo alcanza. Mira hacia abajo. Mira hacia arriba y allí está: mamá luna.

 

 

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150 palabras es una entrega dominical, creada por Marta, (DiarioDeAlgoEspecial) de una microhistoria o microrrelato, con la que podemos dar rienda suelta a nuestra creatividad, y enfocada a los niños. Te daré tres palabras de inicio, y habrá que crear un cuento. ¡de 150 palabras!

Después no te olvides de enlazar con el link aquí debajo y dejar un comentario en cada uno de los blogs que decidas visitar.

Para conocer como nació esta idea de 150 palabras y las reglas, puedes hacer click aquí.


 

1. ¡Mamá qué sabe! 5. monica Lady pink
2. DiarioDeAlgoEspecial 6. Mamá es bloguera
3. Mamamedusi 7. Tuturebolutu
4. Cuando llegó Lucas 8. Madespymas Dandocolo

Tarde de domingo: sensaciones

Domingo tarde, o tarde de domingo. El orden de factores no altera el producto. Y en mi caso el resultado es: pereza, tristeza, apatía…

Con el empezar de los días grises, de las tardes cortas y , por consecuente,  las noches largas ,siempre llega esa pereza al salir de la cama, acompañada de ese destemple al salir de la ducha y ese continuo deseo, según amanece el lunes, de que llegue el fin de semana. Ese fin de semana que nos permitirá parar un poquito la contrarreloj semanera y descansar algún que otro rato.

Los fines de semana son un pequeño oasis. Ese no sonar del despertador. Ese ritmo marcado por los peques pero sin colegios, meriendas, cenas, camas… se lleva mucho mejor… Incluso que esté alguien enfermo, en fin de semana, se lleva con menos carga, porque no hay que hacer malabarismos para atender al enfermo, al trabajo, a la casa…

Pero pese a todo lo anterior, hay algo que no me gusta nada, y que pese al pasar de los años no consigo positivizar salvo cuando estoy de vacaciones, y son las tardes de domingo. Una tarde dura donde las haya. En la que poco a poco ves llegar el comienzo de la semana. Da igual que la pase atareada para no pensar en su pasar… da igual estar tranquilamente en familia en casa tratando de disfrutar de pequeños juegos en común … o simplemente sentarme a leer o a pensar… Las tardes de domingo me superan. Sobre todo estas tardes de domingo del otoño y el invierno. Son tristes… son plomizas… son desestimulantes donde las haya. Aunque tienen algo positivo: son la señal de que queda menos para el siguiente fin de semana.

¿Tienen el mismo efecto tristón en ti? ¿ Cuáles son tus trucos para que te dejen siempre una sonrisa?

Fuente imagen: http://t2.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcS148-dLrX9XcTtSc2QO58RMrkmu-3GK0tJmnkTY8wy5A_3WTVXBw